martes, 11 de octubre de 2011

Montaña rusa 365 días


Mi vida es como una montaña rusa. En los momentos de auge voy subiendo despacito, sin pausa pero sin prisa…parece que no acaban que poco a poco voy alcanzando  la cima. Y cuando llego… ¡ZAS! de golpe hasta lo más hondo. Las curvas son inesperadas, a veces no quiero llegar arriba del todo porque sé que al final caeré…y me costará volver a subir. Hay gente que me empuja y hace la subida más amena, pero también hay momentos en los que me ayudan a subir para lanzarme más fuerte hacia abajo y sí, me duele más así. Y me canso y se me van todas las fuerzas. Por eso si un día me ves sonreír piensa que estoy rozando la cima y que puede que a la mínima me eche a llorar pues empiece a caer sin frenos. No me tengas en cuenta mis cambios de humor ni la importancia que le doy a ciertas cosas en ciertos momentos. Durante la subida todo me parece perfecto, durante la bajada todo es una pequeña tortura que me enfada, me entristece o me molesta. Subir y bajar, bajar y subir…todos los días de mi vida. Supongo que busco alguien que me lleve en línea recta o que me enseñe a mantenerme. Que me pinte esa línea para yo poder seguirla, sin más. Sin preocuparme en sentir, ni llorar ni reír. Estabilidad. Supongo que hacerse mayor consiste en ir encontrando y cuidando esas cosas que te hacen sentir bien y que te mantienen en la línea, sobre la línea recta. En fin, estoy deseando bajarme de esta montaña rusa. 
''Paren el mundo, que me bajo.''

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